Emma contra la basuraleza

Portada del libro Emma contra la Basuraleza

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Sisi está atrapada en el mar. Y no puede nadar para volver a la playa… Una ola con muchas bolsas y botellas de plástico había caído encima de la pequeña foca, inmovilizando a Sisi en medio de una montaña de basura.

Antes, la arena de la playa era limpia y el agua cristalina. Pero, un día, unas personas empezaron a tirar bolsas de plástico, latas, botellas, cajas, mascarillas usadas y más basura en la arena y en el agua… Y, desde entonces, la playa ya no era un sitio limpio y hermoso donde jugar y divertirse. Porque la naturaleza, que antes era limpia y bella, se había convertido en sucia y fea basuraleza.

En esta historia, Emma tiene que rescatar a su amiga Sisi. Y tiene que salvar también al bello mar azul al que Emma y sus amigos iban a jugar y a bañarse, luchando contra la basuraleza.

INDICE

  1. La basuraleza
  2. Atrapada en el mar
  3. Kiko, el pececito
  4. ¡Ayudaaa, ayudaaa…!
  5. Hay que colaborar

A continuación se reproducen los dos primeros capítulos del cuento.

CAPITULO 1 • LA BASURALEZA

Todas las tardes, al terminar el colegio, Emma volvía a casa corriendo y cantando. El pajarito Pipo, la esperaba en un árbol. Y, en cuanto veía salir a Emma del cole, volaba y se subía a la mochila que Emma llevaba en la espalda.

Ese día, cuando estaban a punto de llegar a casa, Emma oyó a Pingüi que corría hacia ella, gritando sin parar…

—¡Emma, Emma…! ¡Ayúdanos…!

—¿Qué ha pasado? —pió Pipo, que estaba subido en el hombro de Emma.

Pingüi, el pingüino amigo de Emma, vivía en la playa del gran mar azul que había junto al pueblo.

La playa era un lugar precioso al que Emma y sus amigos iban a jugar con la arena y a bañarse en el agua limpia y cristalina…

Pero, un día, unas personas empezaron a tirar bolsas de plástico y botellas vacías en la playa… Y luego tiraron también latas, vasos, cajas de cartón, mascarillas y más basura en la arena y en el agua… 

Y, desde entonces, la playa del pueblo ya no era un sitio limpio y hermoso donde jugar y divertirse.

Y los pingüinos, las focas, los pájaros y los peces que vivían allí estaban muy, muy tristes. Ya no podían jugar ni nadar seguros en la playa, porque tropezaban, se golpeaban y hacían heridas con los montones de basura que había por todas partes.

En la playa, la naturaleza que antes era limpia y bella, se había convertido, ahora, en sucia y fea basuraleza.

CAPITULO 2 • ATRAPADA EN EL MAR

—¡Emma, Emma…! —seguía gritando Pingüi, mientras se acercaba corriendo y moviendo sus brazos que eran como alas.

—¿Qué pasa, Pingüi? —preguntó Emma.

—¡Sisi está atrapada en el mar!… ¡Y no puede volver a la playa! —respondió Pingüi, con lágrimas en los ojos.

—¿Por qué, por qué?… —exclamó Pipo, preocupado por su amiga la foquita Sisi, con la que muchos días jugaba en la playa.

—Estábamos jugando en el agua… cuando, de pronto, vino una ola con muchas bolsas de plástico… —dijo Pingüi—. Yo escapé nadando muy deprisa, pero Sisi no vio la ola… ¡Y toda la basura le cayó encima!…

—¿Y no puede volver nadando a la orilla? —preguntó Emma, muy preocupada.

—¡No, no puede nadar…! —dijo el pingüino—. Las bolsas de plástico se han enrollado en los brazos y en las patitas de Sisi… Y está flotando en el mar…

—¿Qué podemos hacer, Emma? —pió Pipo nervioso.

Emma inclinó la cabeza, con la mano en la barbilla, pensando qué podían hacer… Hasta que, dando un salto, gritó…

—¡Ya sé que vamos a hacer!… ¡Pingüi, Pipo… tenéis que ir deprisa a avisar a mi primo Nico!… Decidle que vaya a la playa con su barca —dijo, Emma—. Yo me voy corriendo y os espero allí… ¡Ah! Y, de camino, le diré a Noli que me acompañe.

—Pero Noli es una ardilla y no sabe nadar… ¿Cómo nos ayudará? —preguntó Pingüi.

—Las ardillas tienen unos dientes muuuy fuertes para romper la cáscara de las nueces… Y, con sus dientes, Noli romperá los plásticos que atan a Sisi —respondió Emma—. ¡Vamos, vamos corriendo!

Mientras Pipo volaba en busca de Nico, seguido por Pingüi, Emma corrió a la playa. Y, al pasar por el árbol donde vivía Noli, Emma gritó…

 —¡Noli, Noli… ven, ven conmigo a la playa!… ¡Tenemos que ayudar a Sisi que está atrapada por los plásticos que hay en el mar!

Al oír a su amiga, la ardilla bajó de un salto del árbol donde vivía y corrió tras Emma hacia la playa.